Manifiesto juventud dominicana 2020

La juventud dominicana levanta la voz luego de la suspensión de las pasadas elecciones municipales, mostrándoles a los actores políticos que no estamos sordos, ni ciegos y mucho menos mudos. Esta no es una lucha por quitar unos y poner otros, esta no es una lucha de la oposición, no somos izquierda, no somos derecha, no somos conservadores, no somos progresistas, no somos marxistas, no somos liberales, somos un pueblo joven doliente del sistema corrupto clientelista que manda un mensaje a los actores políticos oficialistas y de oposición de que no jueguen con nuestro futuro.

Somos jóvenes de todas las etnias, colores e ideas bajo una misma lucha. No queremos que partidos se apalanquen de nuestra lucha con fines electorales, también es contra ellos. No queremos que nadie se apropie de nuestra lucha, aléjense de nosotros, no los queremos aquí; hagan su oposición y/o apoyo en otro lado. No dejemos que contaminen esta lucha, no permitamos que se usen cánticos y carteles que puedan insinuar una parcialidad política, no se trata de eso, no somos un movimiento proselitista y si lo permiten están siendo parte del problema. Todos tienen derecho a tener simpatías políticas, y hay que defender ese derecho, tal como dijo Voltaire “No comparto lo que dices, pero defenderé hasta la muerte tu derecho a decirlo”. No obstante, esta lucha va más allá de una simpatía política.

Luchemos por preservar el Estado de derecho, luchemos por los ideales de la ilustración, no nos dejemos sesgar por motivaciones emocionales, usemos la razón, actuemos acuerdo a los principios de la paz, no dejemos que influencias dañinas que buscan perjudicar el movimiento o apalancar ideologías destructivas nos contaminen. Somos mas grandes que ellos, somos jóvenes que se levantan todas las mañanas a trabajar y estudiar por un mejor futuro. Enseñemos a nuestros padres y abuelos que el país nos preocupa, que no queremos que nos arruinen nuestro futuro y que lucharemos para que al tomar la antorcha podamos continuar creando un mejor país para nuestros hijos y nietos. 

La democracia es el gobierno del pueblo, no el de la mayoría. La democracia significa que aquellos que ganen por voto mayoritario deben garantizar las libertades y derechos de todos, construir un mejor país para todos. La democracia es la libre participación de todos, por lo tanto, todos debemos ser vigilantes, centinelas de la democracia, estar ahí presente con el puño hacia el cielo mostrándoles a todos los políticos sin importar del partido que sea que no importa si está dentro o fuera del gobierno, los estaremos observando y exigiendo que no jueguen con nuestro futuro, que el Estado no es su empresa privada, ellos son nuestros empleados, nosotros pagamos sus sueldos, nosotros somos sus jefes, nosotros los ponemos y quitamos. Citando a Montesquieu “Cuando, en un gobierno, al hablarse de la cosa pública, cada uno dice: ‘¿Qué me importa?’ la cosa pública está perdida.”

Somos la generación imposible de callar, porque tenemos una de las herramientas mas poderosas, el internet. Nos podrán prohibir manifestarnos, pero tenemos un arma casi imposible de controlar, no necesitamos balas, solo necesitamos dedos encima de un teclado como aquellos ilustradores que solo necesitaron una hoja de papel para inspirar la revolución francesa.  Sin embargo, la próxima revolución francesa no será violenta, será de conciencia y significará la muerte política de todos aquellos que creen que el Estado es su empresa privada.

Por último me despido con una cita de Rousseau:

“Renunciar a la libertad es renunciar a la cualidad de hombres, a los derechos de humanidad e incluso a los deberes.”




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